La ciencia de los pranayamas- Qué pasa cuando respiro

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En uno de mis retiros de capacitación de Kripalu yoga, recuerdo que experimenté una lluvia de emociones y sensaciones físicas que en aquel entonces no podía descifrar o entender. La capacitación fue intensa y contenía aspectos acerca del manejo de la energía vital por medio de la respiración y la relación entre los estados psicológicos y fisiológicos del cuerpo. Quien diría que años más tarde, todo lo aprendido acerca de la respiración con atención, jugaría un rol tan importante en mi recuperación como paciente covid.

"Prana es el hilo que une cuerpo, mente y atman [el yo] en forma de una guirnalda de flores". -Swami Kripalu

La respiración yóguica y energía vital

La palabra que se usa en el ámbito de la enseña del yoga para la respiración es conocida como pranayama. En sánscrito (el idioma de la filosofía del yoga) pranayama es la combinación del vocablo prana, que significa aire y vitalidad, y yama, que significa moderación.

Algunos textos antiguos sugieren a la definición de prana como la energía espiritual que viaja por medio de la respiración. Sin embargo, existieron sabios como Swami Kripalu, que veían el prana como la cúspide más alta de expresión de vitalidad y la fuerza principal que va entretejiendo la mente, los pensamientos, sentimientos y las percepciones sensoriales del cuerpo.

El término  pranayama entonces, se refiere al proceso de mejorar o controlar el flujo de vitalidad desde su inicio. La vitalidad puede ser resumida como el balance del bienestar.

Nuestros cuerpos y mentes están en constante transmisión de energía, que a menudo solemos canalizar externamente, ya sea que usemos energía en relaciones interpersonales, en cosas o situaciones. Estas experiencias a lo largo de nuestra existencia se van incorporando como parte de la visión de nosotros mismos y la visión del mundo en el que nos desenvolvemos. Sin embargo, el respirar con atención nos enseña a modificar este proceso y nos da la maestría de manejar nuestra fuerza vital en el ámbito físico, mental y emocional incrementado el bienestar en general.

Según investigaciones en entornos clínicos, estos son algunos de los beneficios que la práctica constate de pranayamas nos da:

1. Disminuye el estrés 

2. Mejora la calidad del sueño 

3. Aumenta la atención plena 

4. Reduce la presión arterial alta 

5. Mejora el rendimiento cognitivo 

6. Mejora la función pulmonar para pacientes Covid.

La fisiología de la respiración

Como terapeuta de yoga, una de las preguntas más frecuentes que recibo de mis clientes es, ¿qué pasa con el cuerpo físico cuando respiramos y por qué debo preocuparme por como inhalar y exhalar, sobre todo cuando hago yoga?

La respuesta es algo simple y a la vez extensa ya que el punto principal del control de la respiración es aumentar la conciencia y la comprensión de la relación entre los estados cognitivos, el funcionamiento físico.

Cuando practicamos pranayama estamos elevando la capacidad de atención mientras refinamos la integración de la conciencia y el funcionamiento físico para reducir el estrés y mejorar el funcionamiento psicológico.

  • La frecuencia respiratoria normal de una persona adulta en reposo es entre 12 y 16 respiraciones por minuto, sin embargo, para pacientes Covid, la falta de aire puede dificultar la respiración profunda, dejándolos sin aliento o como si no pudieran llevar suficiente aire a los pulmones.

Si pudieras ver todo el proceso respiratorio te aseguro que quedarías fascinado. La fisiología de la respiración requiere de una sincronía espectacular y lo más misterioso es que todo esto pasa sin que tengamos que hacer algún esfuerzo.

Sigue estos pasos y trata de imaginar el proceso:

Cuando inhalamos, el diafragma y los músculos intercostales externos se contraen. El diafragma se mueve hacia abajo quedando completamente plano y aumentando el volumen de la cavidad torácica. Los músculos intercostales externos impulsan las costillas hacia arriba y hacia afuera, expandiendo la caja torácica y aumentando aún más el volumen del tórax. Este aumento de volumen reduce la presión del aire en los pulmones en comparación con el aire atmosférico. El aire siempre fluye desde una región de alta presión a un área de menor presión por lo que viaja a través de las vías respiratorias conductoras del cuerpo (fosas nasales, garganta, laringe y tráquea) hacia los alvéolos de los pulmones.

Por medio de la exhalación en reposo, el diafragma y los músculos intercostales externos se relajan, restaurando la cavidad torácica a su volumen original (más pequeño) y expulsando el aire de los pulmones hacia la atmósfera. La respiración implica el movimiento del aire dentro y fuera de la cavidad torácica. Esto involucra el intercambio de gases en los pulmones que simultáneamente activa la función autónoma del sistema nervioso, el cual envía mensajes para aumentar la frecuencia cardíaca y el flujo sanguíneo por medio de las arterias.

En definitiva, respirar con atención o practicar panayama fortalece la conexión entre el cuerpo, la mente y fuerza vital.

Existen un sin número de técnicas de respiración. No obstante, después de años cultivando y explorando panayamas simples y elaboradas, siempre regreso a la dulzura que Dirgha o respiración de tres partes me da. Dirgha es para mí la pranayama que activa el poder de mi fuerza vital y todos sus beneficios físicos. Esta respiración es ampliamente recomendada para aquellos en la recuperación de covid.

Parte 1 - Respiración en el vientre:  Inhala por la nariz y trata de expandir tu vientre suavemente a medida que sientas que la respiración se mueve hacia tus pulmones. Luego exhala por la nariz, contrayendo ligeramente los músculos abdominales, asegurándote que puedas sacar la mayor cantidad de aire posible tus pulmones.

Parte 2 – Respiración torácica: Los mismos pasos de la parte 1 y añadiendo la inhalación por la nariz, expandiendo el vientre y luego mueve la respiración hacia la caja torácica y suavemente expándela. Cuando exhales por la nariz, saca el aire de la caja torácica y el abdomen hasta que estén completamente vacíos.

Parte 3 – Respiración bronquial: Pasos de parte 1 y 2 y luego inhala por la nariz, permitiendo que tu vientre se expanda a medida que la respiración se mueve hacia los pulmones y la caja torácica, y luego guía a la respiración a la parte superior del pecho, a los músculos pectorales y la clavícula. Luego exhale completamente.

Recuerda que siempre es bueno consultar a tu médico de cabecera acerca de cualquier cambio en el tratamiento que estás siguiendo.

Fotografía: Lubov Guryanova

Acerca del Maestro

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Lorena Saavedra Smith
Lorena ha venido compartiendo aplicaciones terapéuticas y su compromiso con la salud holística e integral... Leer más