Postura de la pinza

Comparte:

ARMADO Y MOVIMIENTOS CLAVE

Comienza en tadasana, con los pies juntos o separados el ancho de las caderas (es decir, entre diez y quince centímetros o "dos puños" de distancia). Centra tu peso en los arcos de los pies. Alinea la parte posterior de la cabeza con la parte trasera de la pelvis. Lleva las manos a las caderas o levanta los brazos junto a la cabeza con una inhalación. Arraiga los metatarsos en la zona de los dedos gordos y los bordes externos de los talones.

Aparta los pies, como si trataras de abrir el tapete en dos, y mantén este movimiento. En una exhalación, flexiona tu cuerpo hacia adelante desde los pliegues de las caderas (si lo necesitas, flexiona también las rodillas). Mantén la columna alargada y el abdomen activo, evita guiar el movimiento con la barbilla. Al flexionar, empuja la parte superior de los muslos hacia atrás, pero sin desplazar todo tu peso a los talones.

Lleva las puntas de los dedos al piso (o apoya los dedos sobre bloques) y presiona con ellos para ayudarte a activar los músculos más profundos del core. Continúa centrando tu peso sobre los arcos de los pies; mantén arraigado los metatarsos en la zona de los dedos gordos y los bordes externos de los talones.

Estira las piernas hasta el punto en que sientas un estiramiento en la parte media de los isquiotibiales. Si la sensación de estiramiento o un tirón aparece cerca de los isquiones, quiere decir que te has excedido. Relaja el rostro, la cabeza y la mandíbula.

VARIANTES

Apoya las manos en bloques si las yemas de los dedos no llegan cómodamente al piso. Si tienes contraindicado redondear la espalda, quédate en una media flexión hacia adelante (ardha uttanasana o "espalda plana") y apoya la punta de los dedos en el piso o en bloques, estira los brazos, flexiona las rodillas y extiende la columna.

Acerca del Maestro

teacher avatar image
Yoga International Español
Este contenido es presentado por uno o más de los talentosos y dedicados miembros del personal con los... Leer más