Esta práctica de yoga tiene como inicio un calentamiento antirreumático que lubrica todas las articulaciones del cuerpo, comenzando por cuello, hombros, codos, muñecas, falanges, espina, cadera, rodillas y tobillos. Si acabas de regresar de algún viaje y te sientes contraído, esta clase te ayudará a liberar las articulaciones más grandes de tu cuerpo, a activar la circulación y regresarte el equilibrio.