A través de una meditación guiada nos vaciamos de tensiones, de cansancio y de pensamientos. El espacio que creamos en este proceso lo llenamos todavía de más espacio, de posibilidades, de inmensidad. Y, en esa inmensidad, nos dejamos perder por completo entregándonos a la relajación consciente de Savasana. Esta práctica tiene un inmenso potencial sanador a nivel tensional. Y, por ello, es fantástica para eliminar y regenerarnos en situaciones de cansancio físico, emocional y mental.