Uno de los principios básicos de la atención plena o mindfulness es observar nuestros patrones de pensamientos negativos con una actitud lejana a la autocritica. Esta corta meditación está diseñada para promover la presencia intrínseca amorosa y curativa que vive dentro de nosotros y despertar la autocompasión que suaviza los efectos del estrés y la ansiedad que nos dejan atrapados en hábitos de pensamientos limitantes.